Las montañas que rodean Borgo Pace son especiales, no alcanzan grandes altitudes pero a pesar de ello, por su conformación y la naturaleza de los suelos, albergan un entorno decididamente montañoso, con hayas y robles alternandas con prados y pastos.
Aquí arriba, la primavera llega con calma, las bajas temperaturas y los duros inviernos hacen que la temporada de despertar sea gradual, solo para explotar justo antes del verano.
En este largo período entre febrero y junio, en la zona de Borgo Pace, en particular en los "prados altos" de la Alpe della Luna y Bocca Trabaria, se representa un espectáculo que se repite todos los años durante siglos: el florecimiento de miles de plantas que colorean todo el macizo.
Las más tempranas son las flores de azafrán, Crocus vernus, una planta típicamente serrana muy relacionada con la que produce el azafrán que se utiliza en la cocina. Ya al final del invierno se pueden ver las flores violetas de Crocus que cubren los pastos.
Hacia abril y mayo, en cambio, llega el momento de la Lunaria, una planta que cubre grandes extensiones de sotobosque con sus flores de color violeta claro, y luego produce los inconfundibles frutos circulares llamados “medallones del Papa”.
A lo largo de la primavera es posible admirar la floración de las orquídeas, presentes en estas áreas con gran cantidad de especies, diferentes en apariencia, período de floración y hábitat.
La gran riqueza de las orquídeas es una de las razones por las que toda la zona de Bocca Trabaria y Alpe della Luna es un SIC (sitio de interés comunitario).